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Desechar todos los cigarros y ceniceros, deshacerse de cerillos y encendedores.
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Pensar en cualquier imagen negativa acerca del cigarro.
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Adoptar una actitud positiva: tratar de concebirse como exfumador.
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Cada vez que sienta deseos por fumar, inicie un sencillo ejercicio de relajación y de respiración: respire profundo las veces que sea necesario.
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Reúnase con amigos que no fuman.
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Asista a lugares donde no se permita fumar: cines, museos, teatros.
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Busque algo que hacer con sus manos.
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Consuma líquidos como agua, jugo o leche, evite consumo de bebidas estimulantes como café o alcohol.
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Cada vez que sienta deseos de fumar puede usar algún sustituto oral como las ramitas de orozuz, canela, un popote, boquilla de sabores.
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Disfrute del dinero que ahorrará no fumando, incluso puede darse un premio o un regalo, usted lo merece.